Las nuevas tecnologías han cambiado el concepto de productividad de numerosas empresas. Y es ahora, gracias a la recopilación de datos, es mucho más fácil aumentar nuestra eficiencia, a la vez que automatizamos tareas y dedicamos mucho más tiempo a actividades que aportan un gran valor a los negocios y que son una prioridad en el día a día.
En este artículo descubriremos en qué consiste el Business Intelligence, cómo puede ayudarte a agilizar considerablemente tus flujos de trabajo y en qué se diferencia del Big Data.
Business Intelligence (BI) es un conjunto de tecnologías y estrategias que ayudan a transformar los datos en información útil. De esta manera, las empresas tendrán una visión mucho más clara de sus operaciones, lo que les facilitará la toma de decisiones. Las funciones del BI son:
Al analizar todos estos datos, las empresas pueden identificar rápidamente nuevas oportunidades de mejora en sus equipos de impresión y procesos de gestión documental.
Estas son las principales ventajas de incorporar la tecnología BI en la gestión de documentos de tu negocio:
A nivel general, estos son los beneficios más importantes que aporta el BI a las empresas de diferentes sectores:
El BI ayuda a identificar ineficiencias en los procesos y optimizar el uso de los materiales y recursos. Por ejemplo, una empresa de manufactura puede utilizar esta tecnología para agilizar su cadena de suministro.
Mayor satisfacción del cliente: al conocer y comprender en profundidad cuáles son las necesidades de los clientes, las empresas pueden ofrecer productos y servicios mucho más útiles y personalizados. Por ejemplo, una empresa de telecomunicaciones puede usar el BI para analizar las tendencias de uso de sus clientes y ofrecer servicios más adecuados.
Al optimizar los procesos de producción y mejorar la eficiencia y productividad, el BI puede ayudar a los negocios a reducir sus costos en diversos departamentos, como el área de marketing, ventas o recursos humanos.
Por ejemplo, una empresa de logística puede beneficiarse de esta herramienta al reducir sus costos de transporte y agilizando la entrega de sus productos al cliente final.
Al proporcionar información mucho más específica, el BI permite tomar decisiones mucho más informadas y basadas en datos. Por ejemplo, una empresa de retail puede saber cuáles son sus productos más vendidos según la ubicación y solicitar más productos para aumentar sus ventas.
Identificación de nuevas oportunidades de negocio: el BI puede revelar tendencias emergentes y oportunidades de mercado que de otro modo podrían pasar desapercibidas. Una empresa de tecnología puede utilizar el BI para identificar nuevos mercados y segmentos de clientes a los que dirigirse.
Aunque el Big Data y el Business Intelligence están muy relacionados, no son lo mismo. El Big Data se refiere a grandes volúmenes de datos estructurados y no estructurados que son difíciles de procesar con algunas herramientas tradicionales.
En cambio, el BI es el proceso de convertir esos datos en información útil para tomar decisiones.
Como ves, el Business Intelligence es una herramienta muy valiosa, capaz de aportar una visión clara y precisa de los datos, que permite a las empresas tomar decisiones de manera ágil, mejorar la eficiencia y productividad, brindar la mejor experiencia a los clientes e identificar nuevas oportunidades de negocio.
En definitiva, el BI es mucho más que una tecnología innovadora para gestionar y organizar los datos. Se trata de una necesidad para cualquier empresa que quiera impulsar su crecimiento y aumentar sus ventas.
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