La nube se está convirtiendo en una necesidad básica para todos los sectores que operan en el mundo digital. La educación no es una excepción, y su sector ya se está preparando para beneficiarse de la transición hacia el Cloud Computing. ¿Cuál será su aceptación? Profesores y estudiantes prevén que esta tecnología les ayudará a mejorar su productividad y capacidad de aprendizaje.
Conscientes de su potencial, los gobiernos y las administraciones están respaldando el esfuerzo global hacia una transformación digital en los ambientes educativos. Y es que, las instituciones se han percatado del espacio que colegios, universidades y otras plataformas de enseñanza están dejando al necesario servicio del Cloud Computing.
Tal y como reseña EdTecg, el 90% de los distritos escolares de primaria, que participaron en la encuesta 2018 Infrastructure Survey elaborada por CsSN, aseguraba usar la nube como almacenamiento, mientras que el 88% apuntaba a sistemas de software basados en dicha tecnología. Parece evidente que el sistema educativo de Estados Unidos está ante una modernización fugaz de sus infraestructuras informáticas.
A continuación, Kyocera analiza los beneficios del Cloud Computing. Lo hace presentando cinco grandes ventajas para los profesionales de la educación:
Un de las grandes ventajas que percibirán los colegios tras implementar el Cloud Computing es la reducción considerable de costos. Con ella los profesores y los estudiantes pueden ahorrarse el dinero de los caros libros de texto, para acceder a la mayoría del contenido de forma online. El uso de la nube está resultando ser más asequible a mediano plazo que invertir en libros físicos.
Siguiendo esa misma línea, el Cloud Computing también elimina los grandes costos de papel a los que se enfrentan los colegios. Lo consigue gracias a su compatibilidad con móviles, tablets y computadores. Dicha ventaja no solo es buena en términos financieros, sino que además permite minimizar la huella de carbono del sector.
A través del Cloud Computing los colegios pueden transferir, crear y editar más contenido digital que nunca. Es decir, que moldea un acceso universal y completo a los recursos educativos.
Diseccionando la disponibilidad se llega al aprendizaje: a algunos alumnos les resulta más sencillo y atractivo inscribirse en programas educativos, cursos e incluso títulos universitarios cuando se ofertan de manera online. Contar con todo el contenido educativo a tan solo unos clics de distancia permitirá a los alumnos del futuro decidir cuándo y cómo estudiar.
La nube permite a los profesionales de la educación actualizar y modificar a demanda cualquier contenido. También asegura que todos los recursos de enseñanza almacenados en la nube estén actualizados y mantengan su calidad.
Esto tendrá un impacto considerable en el aprendizaje. Y es que, libros de texto tradicionales no se solían actualizar ni revisar con frecuencia. Por eso los colegios dependían muchas veces de recursos caducos. El problema desaparece con la nube.
Los cambios tecnológicos actuales suponen una fuente de oportunidades para aquellos profesores dispuestos a innovar y ser más creativos en la preparación y ejecución de sus lecciones.
Apostar por el contenido en la nube es una gran estrategia para incentivar la enseñanza interactiva entre los jóvenes que guiarán el mundo digital del mañana. El aprendizaje con apoyo multimedia ha demostrado ser estimulante para los estudiantes, haciendo las clases más entretenidas para todos.
Los profesionales ahorran tiempo al migrar sus estrategias hacia el contenido digital. No es casual: la flexibilidad que ofrece la tecnología en la nube permite a los profesores preparar sus clases desde donde y cuando quieran.
La colaboración entre profesores es, asimismo, más sencilla a través de una sola plataforma. Los profesionales pueden compartir ideas y recursos de forma instantánea y en cualquier momento.
¿Qué implica todo esto? Para satisfacer la demanda de transformación digital en el sector educativo se ha de comenzar por el Cloud Computing. De hecho, no es complicado encontrar a profesionales involucrados y posicionados en favor de una transición digital.
Al ofrecer una forma simple y moderna de acceder, compartir, actualizar, gestionar y descargar digitalmente contenido, el Cloud Computing está proyectando una solución para los presentes y futuros desafíos del sector educativo. A través de esta aproximación, las organizaciones no solo pueden ver reducidos sus gastos, sino que además los estudiantes podrán beneficiarse de un nuevo y satisfactorio mundo de recursos y eficiencia capaz de mejorar su experiencia de aprendizaje.
Las soluciones basadas en la nube están atrayendo negocios y organizaciones de toda índole.